El estado edilicio de varios museos y espacios culturales de la zona céntrica de la ciudad de Córdoba deja mucho que desear. Si bien son lugares que, a simple vista, parecen estar en buenas condiciones, presentan falencias de mantenimiento en mayor o menor grado.
En estos inmuebles culturales pueden descubrirse deterioros en paredes, techos y muros externos e internos.
Los problemas más recurrentes son humedades, rajaduras, caída de revoques y pintura descascarada. A veces, también padecen desperfectos eléctricos y deficiencias lumínicas (ver
Mapa interactivo: museos en problemas).
Josefina Piana, asesora de la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos de la Nación, entiende que hay “un decaimiento importante” en todo lo relacionado con la conservación de museos y espacios culturales. “Hoy, la atención de las autoridades está puesta en otras cosas”, opinó.
Sin embargo, desde la Agencia Córdoba Cultura se informó que hay una actividad constante de mantenimiento y reparación de museos, que en su mayoría son edificios antiguos. Hasta se aclaró que los inconvenientes surgidos no obligaron al cierre de estos espacios.
Uno por uno
Museo de Arte Religioso San Alberto (Caseros 124). Está invadido por humedades en techos, muros externos e internos, galerías y salas donde se exponen muebles, utensilios, obras de arte, documentos y objetos antiguos. La pintura y los revoques se caen en varios sectores. El piso fue restaurado recientemente. Las palomas afectan el inmueble. Necesita mejor señalización.
Ubicada en la zona jesuítica, esta casa-museo abrió al público en 1980 y es administrada por la Municipalidad de Córdoba, según un convenio con las Hermanas de Santa Teresa de Jesús, dueñas del viejo inmueble de 1782. Abre de 9 a 10.30, de lunes a viernes. A veces hay que tocar el timbre para ser atendido. Por la tarde, sólo puede recorrerse con reserva previa.
El municipio debe ejecutar el mantenimiento edilicio del museo. Según empleados del lugar, en el sector de la cripta falta iluminación, algunas barandas de escaleras requieren reparaciones y no hay accesibilidad para discapacitados. Faltan alarmas y guardias.
Museo de las Mujeres (Rivera Indarte 55). Es un edificio antiguo donde a fines del siglo 19 funcionó la sociedad El Panal. Hoy, en este museo provincial se observan humedades en las paredes del auditorio y en muros del hall ubicado enfrente. La pintura se desgastó, se caen revoques y hacen falta reparaciones de techos.
El fondo del Museo de las Mujeres se conecta lateralmente con el patio de la ex Escuela de Artes Aplicadas Lino Spilimbergo, cuyo frente da a calle 9 de Julio. Este inmueble (Monumento Histórico Provincial) está abandonado, copado por palomas y en mal estado, al punto de que hubo caída de mampostería desde los balcones externos hacia la Peatonal.
Pueden verse andamios y medias sombras en su fachada, además de un vallado perimetral. Personal del Museo de las Mujeres dicen que hay peligro de derrumbes en el patio (ver
Galería de Fotos).
Museo de Bellas Artes Genaro Pérez (General Paz 33). Refleja humedades en techos y paredes interiores. En particular, afloran en la sala intendente Donato Latella Frías, donde se destaca una enorme pintura en tela de Emilio Caraffa.
También hay humedades en otras salas, tanto en la planta baja como en la alta. En el exterior de los techos anidan palomas.
Acerca de este palacete de estilo francés (1905-1910) que perteneció al ex gobernador Félix Garzón, defensores del patrimonio alertan por la ausencia de mantenimiento edilicio y dicen que debería restaurarse la cubierta exterior de techos para solucionar el problema.
En este museo (creado en 1943) pueden verse molduras en el piso superior (a metros de los baños) donde la pintura se descascara, y pequeñas rajaduras en paredes y techos interiores, por ejemplo en la sala José Malanca y en otra sala de la planta alta.
El director del Genaro Pérez, Pablo Mrakovich, dijo que pidió fondos a Cultura municipal para mantenimiento de membranas y arreglo de la sala Latella Frías. “No hay goteras, pero se requieren obras”, admitió.
Museo de Arte Religioso Juan de Tejeda (Independencia 122). Está cerrado desde hace más de dos años y esto queda en evidencia a través del cartel que se colocó en la puerta de ingreso. En una breve explicación, se indica (en español y en inglés) que está “en restauración”. Sus muros exteriores presentan deterioros en revoques.
El edificio donde funciona es Monumento Histórico Nacional. El museo alberga colecciones de arte exclusivas.
Centro Cultural España-Córdoba (Entre Ríos 40). La fachada de esta casona neocolonial fue pintada al látex en amarillo, rojo, negro, celeste y verde. Defensores del patrimonio cuestionan esta intervención, porque el inmueble está protegido por ordenanza al ser de categoría alta en el listado de bienes patrimoniales de la ciudad.
Inaugurado en abril de 1998, el inmueble presenta pequeños deterioros de pintura en las paredes del sector del patio, donde está el aljibe.
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